El 26 de agosto se celebra el “Día Internacional contra el Dengue” con el objetivo de fomentar la reflexión y prevención de la enfermedad que contagió a 3.139.335 latinoamericanos en el 2020. Para ello es importante conocer qué la ocasiona y cómo se contagia.

El dengue es una enfermedad infecciosa aguda producida por un virus de la familia Flaviviridae, con 4 serotipos diferentes, y transmitida por el mosquito AEDES AEGYPTI, con su característico cuerpo rayado blanco y negro, elige aguas residuales, urbanas, contenidas y estancadas para reproducirse y criarse. A lo largo de su mes de vida, el mosquito hembra, la misma que pica, puede poner entre 100 y 400 huevos en distintos recipientes con agua quieta, que se convertirán en adultos en 7 días.

Es importante destacar que los mosquitos no nacen con los virus en su cuerpo sino que lo adquieren al picar a una persona infectada, convirtiéndose en portadores y por ende, transmisores de la enfermedad al picar a nuevos seres humanos.

Los síntomas habituales de la enfermedad son fiebre, manchas rojas en la piel, conjuntivitis, dolor muscular y ocular , pero pudiendo llegar hasta vómitos y sangrado de nariz y encías, entre otros, si se manifiesta el tipo de dengue hemorrágico.

Para evitar la propagación del mosquito es fundamental terminar con el estancamiento de agua. Para ello:

– Quitar o invertir los recipientes con agua en desuso.

– Limpiar los contenedores con lavandina.

– Procurar que los contenedores renueven su agua semanalmente y que este en circulación constante.

En caso de contagio ir al médico, no automedicarse, tomar mucho líquido y hacer reposo. Entre todos podemos hacerle frente a esta enfermedad. Cuidemos de nosotros y los otros.

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