Desde 2013, cada 3 de marzo se celebra el Día Internacional de la Vida Silvestre conmemorando la fecha en la que se aprobó la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres en la asamblea de las Naciones Unidas.

Cada especie animal y vegetal, además de tener un valor intrínseco único, contribuye a los aspectos ecológicos, genéticos, sociales, económicos, científicos, educativos, culturales, recreativos y estéticos del bienestar humano y el desarrollo sostenible.

Hoy (y siempre) queremos celebrar, agradecer y respetar nuestra fauna y flora, tan perfecta y variada y al mismo tiempo tan amenazada por la humanidad. Confiamos en que algún día se tome conciencia de su magnitud e importancia y nos volvamos un planeta sano y sustentable.

Esta comunicación está especialmente dedicada a Corrientes. Les enviamos todas nuestras fuerzas por su devastadora situación.